Tímido

Noche de verano, y como siempre, Alejandro salía de campamento al gran bosque con sus grandes amigos de la universidad

El bosque había sido devastado por una reciente tormenta, lo cual ellos tendrían la oportunidad de tener menos gente acampando en lo que ellos llamaban “Su Bosque”.

Y así partieron desde la gran ciudad en el pequeño auto de compañero y amigo de la infancia Ignacio, Ignacio y Alejandro prácticamente crecieron juntos y tambien estaba Franco que lo conocieron en la secundaria, y el otro chico era un gran amigo de Ignacio, de la universidad también, este se llamaba Álvaro y era un poco más gordito que los demás chicos.

Al llegar al bosque se sorprendieron al ver que estaba totalmente destruido, antes era un paraíso lleno de arboles altos, ahora parecía un bosque muerto.

-Que tenebroso debe ser de noche .-Menciono Ignácio, señalando una cueva que se observaba a la distancia.

-¿No vamos a pasar la noche aquí o sí?- Decía Álvaro, él era algo miedoso comparado con los demás chicos.

-Y Dime Álvaro, ¿a qué piensas que hemos venido aquí?, a cierto que es la primera vez que vienes, no pasaremos la noche, pasaremos el fin de semana aquí.-Alcanzo a decir Franco cuando los 4 muchachos empezaron a escuchar música, solo que se oía a la distancia.

-¡Viene desde el sur! ¡Vamos!

Caminaron por un largo rato, mirando a su lado la destrucción que dejo la tormenta, cabañas rotas, grandes árboles arrojados como si fueran ramitas, luego de un tiempo, observaron en un claro una fogata y un pequeño grupo de adolescentes que aproximadamente eran 2 años menores que ellos.

-Vayamos a averiguar que están haciendo aquí.

-Si eso haremos, mira que linda es la de pelo negro.

-Creo que la conozco, se llama Margaret pero le dicen Maggy es mi vecina.

-Es bonita, ¿cierto Álvaro?

-Si, vaya que lo es.

-Te apuesto 1000 dólares a que le das un beso.

-¿Cómo? Yo no podría hacer eso, no se me dan las chicas por ser algo feo.

-Aah no importa, te ayudaremos, pero ahora vayamos hacia aquel claro dónde está la chica con sus amigos.

Los chicos se estaban acercando al pequeño grupo cuando Maggy se acerco a saludar a Franco y a sus amigos.

Ignacio se reía por que Álvaro se había puesto muy nervioso cuando Maggy lo saludo, pronto fueron sus amigos a saludarlos también, todos eran buenas personas, entonces Ignacio propone a su grupo lo siguiente:

-Pasemos la noche con ellos, tienen mucha comida y así no estaremos aburridos, ¿qué opinan?

-Está bien, igual a mí me dio miedo también pasar la noche solos. -Decía Franco, estando de acuerdo con sus 3 amigos.

Entonces le dijeron a Franco que le diga a su vecina y amiga lo que le parecía la idea, ella acepto encantada por decir que necesitaba gente más grande y que sea responsable para "protegerla"

Ya de noche, y todo el grupo de jóvenes alrededor de la gran fogata, se dispusieron a contar historias de terror, para ellos eso era “atemorizante” o solo era para dar unas carcajadas y poder asustar al mas miedoso para que le cueste dormir.

Había un chico ahí, conto la historia sobre una criatura de la noche, que simplemente se alimentaba de la viveza y juventud de los jóvenes puros, y a los impuros los condenaba transformándose en esa misma criatura, la historia asusto bastante a los adolescentes, el chico al finalizar les mostro una fotografía, Al parecer era de la bestia, el dijo que tapemos los ojos, de tan solo ver a los ojos a esa bestia, ella aparecería y masacraría al que la miro a los ojos, el paso la foto, nadie se animo a verla a los ojos, hasta que el grupo de Alejandro tomo la foto, y con un dedo taparon la cara de la bestia, y comentaron a lo demás lo horrible que era, pero la curiosidad por ver el misterioso color de sus ojos los carcomía por dentro. El pequeño grupo de amigos no creia en que apareciera la criatura, aun asi no quisieron averiguarlo.

Cuando le pasaron la foto a Álvaro todo fue diferente, él vio a la bestia a los ojos como estaba en la fotografía, de repente menciono que no se sentía bien y los demás empezaron a regañarlo por no hacer caso, empezó a soplar muy fuerte el viento, el fuego se apago y todo finalmente se torno muy silencioso en el bosque, Maggy junto a su amiga Cintia, empezaron a llorar por desesperación.

De pronto escucharon un agudo chillido que aturdió a todos, a la mayoría de los chicos más jóvenes los hizo vomitar, pues el chillido era muy agudo, todos empezaron a correr en la oscuridad del tenebroso bosque.

​Llegaron a una abandonada cabaña, todos asustados, todavía escuchando ese horrible chillido que se acercaba cada vez más, Alejandro e Ignacio trabaron la puerta de la cabaña como pudieron pero no fue suficiente, la bestia entro para masacrar totalmente a quien se animo a observar sus ojos, Álvaro quiso correr pero no fue suficiente, la bestia tomo su pierna izquierda y delante de todos sus nuevos amigos, la bestia lo despedazo a la mitad, causando que todos los jóvenes reciban un baño de sangre.

 Lo que más miedo daba era que Álvaro seguía gritando y mirando, ahora en persona, a la bestia que soltó su chillido de nuevo, la agudeza fue tan potente que hizo que la cabeza del joven estallara.

Alejandro les hablo a sus compañeros que salgan con los ojos cerrados de la cabaña y que por más que quieran, no abran los ojos por ninguna razón, solo así podrían salir con vida de esa cabaña abandonada.

Ellos observaron para atrás para ver si la bestia no los seguía pero notaron algo muy raro, la bestia ahora estaba en un estado “de reposo” y se pudiera decir que estaba llorando, sus largas y oscuras manos cubrían su misterioso rostro que era prohibido verlo.

Siguieron corriendo hasta que encontraron el auto de Ignacio, subieron todos los que pudieron pues era muy pequeño, decidieron marchar lo más rápido posible.

-No puedo creer que esta simple fotografía causara tanto sufrimiento. ­–Menciono uno de los jóvenes, llamado Esteban. –Tiene algo de lodo, la voy a limpiar.-Repaso varias veces la manga de su chaqueta sobre la foto y noto que una gran mancha cubría el rostro de la bestia, nadie prestaba atención a lo que hacía, así que decidió limpiar para ver los ojos de la bestia, el pensó que la bestia estaba demasiado lejos como para alcanzarlos.

Limpio la foto y observo el rostro, sus ojos quizás podrían reflejar lo más triste de la vida de alguien, o quizás la muerte misma, fue cuando volvieron a oír ese agudo Chillido que nuevamente los aturdió a todos.

Ignacio que conducía vio una silueta a la distancia que se aproximaba rápidamente hacia el auto, pues era la bestia.

Ignacio atino a apagar las luces así la bestia no los veía y se marchaba pero fue imposible, la bestia soltó otro agudo chillido que hizo que el parabrisas reventara, junto con las luces apagadas del coche, esto los hizo salirse de control y estrellarse contra un árbol

La bestia nuevamente saco violentamente a quien se haya atrevido a observar a sus paralizantes, negros y profundos ojos.

A Esteban lo tomo de los brazos, y lo arrojo hacia la carretera, fue entonces cuando salió corriendo la bestia, fue tal la fuerza con la que arrojo al chico que hizo que su cuerpo saliera volando, entonces en el aire, la bestia salto y le atravesó el pecho a aquel atrevido joven, haciendo estallar su torso y sus órganos vitales, al caer al suelo nuevamente se puso en ese estado triste que asustaba mucho más que cuando largaba su gran chillido.

Franco reacciono y decidió revisar si estaban bien los jóvenes, Cintia y otros dos chicos habían muerto, Ignacio estaba muy mal herido y con una rama incrustada en su pierna, Alejandro había perdido un ojo, Maggy estaba bien, solo tenía unos cortes en la cara y una costilla fracturada.

Decidieron salir por ayuda, pues no sobrevivirían mucho en ese estado, de repente escuchan ese chillido horrible de nuevo.

-¿Pero y ahora que hemos hecho? ¡Corramos!-Gritaba Alejandro.

Salieron corriendo entonces Alejandro tomo la peor decisión de todas, arrancarse el ojo que le quedaba y tratar de enfrentar a la bestia, el tomo su cuchillo y tomando mucho valor se arranco su ojo derecho, el gritaba sin parar cuando llego la bestia y simplemente lo tomo por la cintura, pero esta vez no lo masacro, la bestia le grito y lo mordió, luego de hacer esto, la bestia lloro mas fuerte aun y se empezó a incinerar mientras caminaba despacio, a unos pocos metros solo se transformo en una gran llamarada que lo incinero por completo, dejando solo un montón de cenizas.

Ignacio al revisar la herida de su amigo le menciono que no es nada grave, entonces fue cuando Alejandro se desmayo y nadie lo pudo levantar, de el bolsillo de su abrigo salió una fotografía de la bestia que recientemente habían enfrentado, solo que esta vez, la bestia tenía la misma ropa que Alejandro.

-¡O no puede ser! La bestia transformo a Alejandro, debemos dejarlo y largarnos de aquí ahora mismo.

-No, no podemos hacer eso de seguro hay alguna cura.

-Míralo Maggy, lo hemos perdido.

Entonces vio como el cuerpo de Alejandro se empezó a transformar, su cuello se estiro por completo, sus brazos se empezaron a comprimir, su pelo se cayó por completo y sus piernas se separaron de su cuerpo y empezaron a crecerle otras mucho más largas y angostas, igual que en la bestia.

-Corramos, no lo mires a los ojos por lo que más quieras en el mundo, No lo hagas.

Salieron de nuevo hacia el bosque y encontraron la misma cueva que vieron al llegar al bosque, se decidieron refugiar allí.

Al entrar encontraron viejos documentos que relataban a una misteriosa bestia creada por el gobierno, mencionaba las mismas cualidades que tenia la bestia a la que enfrentaban, y había más fotos allí, solo que estas fotos tenían la ropa de su amigo Alejandro.

Maggy vio la fotografía directamente a los ojos, fue cuando escucharon ese Chillido y la bestia venia a reclamar otra vez mas una víctima, La bestia apareció entonces todos la vieron a los ojos y la bestia en esa cueva masacro totalmente a los jóvenes que quedaban.

La bestia, como solía pasar, se volvió a su estado de tristeza y lagrimas se tapaba la cara simplemente se podía decir que solo era muy tímido y que no quería que nadie viera la oscuridad y frialdad que había en su espíritu, por eso masacraba.

“Hagas lo que hagas, simplemente no la mires a los ojos”

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